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Jóvenes de distintas ciudades, pueblos y localidades de las provincias del Elqui y del Limarí vivieron en la Catedral de La Serena la Misa de Envío, encuentro previo al viaje que realizarán a la Jornada Mundial de la Juventud.
Son unos 200 jóvenes de parroquias, capillas, colegios y universidades, principalmente, los que en las próximas semanas vivirán esta experiencia de reunirse junto a millones de otros jóvenes en un Encuentro de Fe entre el 23 y 28 de julio, junto al Papa Francisco, en Río de Janeiro.
En esta Misa de Envío, el padre Ariel Robledo, Asesor de la Pastoral Juvenil diocesana dijo que la Iglesia vive “con mucha alegría, son jóvenes de distintas parroquias del sector rural y urbano, y han venido aquí para que el Señor los pueda fortalecer en su vida de fe. Los jóvenes están muy contentos de poder participar en la Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro”.
Desde Tongoy viajará una representativa delegación y Claudio Valdivia, uno de los jóvenes de la parroquia Santa Rosa de Lima compartió las expectativas que tienen de esta jornada. “Vamos con todas las ganas a participar con este grupo de jóvenes que son como 18 personas, y con todas las esperanzas que nos vaya bien y ganar experiencia y todo lo bueno que trae este encuentro”.
También desde el Seminario Mayor Santo Cura de Ars, donde se forman los futuros sacerdotes, compartieron las ganas de participar de este Encuentro. El seminarista Eduardo Cuello, dijo que “estamos súper animados después de harto trabajo, de harta organización, vamos con un espíritu muy contento, renovados con este Envío que nos hizo nuestro Arzobispo y vamos con mucha energías de escuchar lo que nos diga nuestro Papa”.
Tras esta Misa de Envío para quienes participarán de la Jornada Mundial de la Juventud en Brasil, el Arzobispo de La Serena Don Manuel Donoso compartió la alegría por la experiencia de Fe que vivirán los jóvenes. “Es ir a una experiencia que los va a marcar para toda la vida. He oído que cuando Juan Pablo II vino aquí los marcó, y esto los va a marcar más. Además, encontrarse con uno o dos millones de personas es una experiencia única en la vida. Lo importante es el encuentro con Cristo, que la relación con el Señor crezca, permanezca y sea grande y no solo saber de él, sino saber hablar con Él y vivir con Él”.
En esta Misa de Envío los jóvenes que viajarán a Brasil a la Jornada Mundial de la Juventud fueron acompañados por familiares y agentes pastorales de sus comunidades. También por sus párrocos y sacerdotes que trabajan pastoralmente en colegios y universidades.
