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Después de dieciséis años, nuevamente en el templo de Sotaquí se celebró la Misa en honor al Niño Dios, en el día de su fiesta.
Después de que a mediados de agosto fuera entregado al arzobispado el templo restaurado y se comenzarán a celebrar las misas allí, también correspondió celebrar la fiesta chica o Fiesta Menor, en honor a su Santo patrono.
Durante nueve días, como es tradicional, la comunidad católica se reunió para hacer oración al niño Dios. El fin de semana los bailes religiosos comenzaron a llegar a Sotaquí para cumplir con sus promesas, al igual que cientos de fieles que llegaron a renovar sus mandas.
El día de la fiesta, el primer domingo de septiembre, el Arzobispo de La Serena Don Manuel Donoso presidio la Santa Misa en el templo, junto al Padre Héctor Zambra, párroco de Sotaquí y rector del santuario. Al comienzo de la Eucaristía se hizo una bendición especial a todos los fieles que participaron de esta Misa en un templo repleto, la que además fue seguida por cientos de peregrinos en las afueras del santuario.
En su homilía el Arzobispo, Don Manuel Donoso, agradeció nuevamente a todos los que permitieron tener restaurado el templo de Sotaquí, lo que permitirá mejorar el servicio pastoral en la parroquia y durante las fiestas de septiembre y enero, especialmente al contar con un patio interior que permitirá la reflexión y las confesiones.
Asimismo, llamo a los fieles a preocuparse del propio templo que es uno mismo, para que siempre esté dedicado a Dios y disponible para acoger a Jesús.
En la misa del mediodía participaron principalmente los jefes de los bailes religiosos, la comunidad católica de la parroquia de Sotaquí, junto a fieles y devotos del niño Dios que llegaron de distintos lugares a renovar sus promesas.
Tras esta Eucaristía la imagen del niño Dios y la de su Madre la Virgen del Carmen salieron en procesión desde el templo, para recibir el homenaje de los bailes religiosos.
Por la tarde se celebró una nueva Eucaristía y se desarrolló la procesión por las calles de Sotaquí, en esta fiesta chica del niño Dios que se celebró con el templo restaurado, después de dieciséis años desde que el anterior quedará inutilizado producto del terremoto de 1997.
