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Su primera visita a comunidades católicas en Combarbalá cumplió Monseñor René Rebolledo, tras ser invitado por el padre Cristian Montenegro, párroco de esta comunidad.
En Combarbalá, nuestro Pastor comenzó su recorrido temprano por la mañana, para poder visitar las 9 localidades que se incluyeron en esta ocasión. El recorrido comenzó en un encuentro con la Comunidad Católica en El Sauce y luego en Quilitapia, hasta donde llegaron vecinos y agentes pastorales de unos 10 poblados que rodean esta localidad, donde se hizo una pequeña procesión con las imágenes de las capillas junto a los Bailes Religiosos, terminando la mañana en Soruco.
Las actividades continuaron en la ciudad de Combarbalá, con un saludo al Alcalde Pedro Castillo, ocasión en que, junto al padre Cristian Montenegro, conversaron de diversos temas de interés para la comunidad urbana y rural, continuando con un almuerzo junto al Consejo Parroquial. Allí nuestro Arzobispo les agradeció el servicio que realizan por la Iglesia y los motivó a continuar el trabajo pastoral en cada una de sus comunidades, especialmente en este año de la Misión Territorial.
Por la tarde el viaje fue largo hasta La Invernada, un de las localidades más alejadas de la Parroquia de Combarbalá, donde nuestro Arzobispo René Rebolledo compartió con la comunidad católica que lo esperaba, los animó a continuar con la restauración de la capilla y además bendijo la recién inaugurada plaza. Esta visita continuó con encuentros comunitarios en El Durazno, Barrancas, Chineo y La Isla, donde los fieles recibieron a Monseñor Rebolledo con bailes, cantos y oraciones preparadas especialmente para la ocasión.
Esta primera visita de Monseñor René Rebolledo a Combarbalá concluyó en el templo parroquial de San Francisco de Borja, donde presidió la Eucaristía y los motivó a ser protagonistas de la Misión Territorial.
El padre Cristian Montenegro, parroco de Combarbalá, dijo que “esta visita se transformará en un impulso para la actividad misionera, porque cada niño, joven y adulto, recibió el mensaje de que en donde esté, puede hacer Misión, en su pueblo chico, grande, alejado, seco, o con agua. Que en cualquier circunstancia, incluso en la enfermedad, se puede hacer oración por la Misión”.
