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En el Seminario Mayor santo Cura de Ars se dieron cita los grupos de oración por las vocaciones, que tres veces durante el año se reúnen a orar y compartir con los seminaristas.
En esta ocasión Monseñor René Rebolledo, Arzobispo de La Serena, participó de la actividad transmitiendo como mensaje que es una alegría inmensa tener personas que rezan por las vocaciones. Agregó que “el Seminario es el corazón de la diócesis, sin los grupos de oración no habría Seminario ni tampoco sacerdotes. Es por eso que hay que comprometerse a orar al Dueño de la mies para que envíe trabajadores a su viña, pero incorporando a más personas a participar de esta iniciativa”.
Tras concluir el saludo de bienvenida los seminaristas Oliver Pasten y Luis Díaz destacaron la importancia de los grupos de oración en la vida formativa del Seminario y la perseverancia que han tenido a pesar de los momentos complicados que ha vivido la Iglesia durante estos últimos años. También, agradecieron el gesto significativo de saber que alguien está rezando por ellos y por la Iglesia universal. Luego los integrantes de los diferentes grupos participaron de una hermosa Adoración al Santísimo y de un ágape fraterno.
Los seminaristas también agradecieron los momentos de oración que se han vivido en tantas comunidades católicas, porque las parroquias y grupos de la Arquidiócesis se han unido a la invitación de nuestro Arzobispo y de la Pastoral vocacional, para realizar momentos de oración frente al Santísimo Sacramento para orar por las vocaciones. Esta iniciativa ha permitido que muchas comunidades de las diferentes vicarias estén en sintonía con el Mes Vocacional que comenzó con la celebración Eucarística del cuarto Domingo de Pascua.