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Mientras la Iglesia de La Serena continúa coordinando la recepción y entrega de ayuda para las familias afectadas por el terremoto y tsunami, junto con el acompañamiento en las localidades costeras y los valles de la región de Coquimbo; también se comienza a elaborar el propio catastro de daños. Y es que producto del terremoto 8,4 que afectó a la zona, junto con las viviendas de familias, también resultaron dañados templos en las provincias de Elqui y en mayor medida en la provincia de Limarí.
En estos días ya hay información preliminar de estos daños, siendo los principales en la Vicaría de Limarí que posee las iglesias más antiguas y algunas que ya habían resultado afectadas con el terremoto de 1997, como también otras que pudieron ser restauradas en estos años. En la primera inspección hay templos que sólo muestran desprendimiento de pintura, pero existen otros con daños de mas complejos que deben ser evaluados en profundidad.
Respecto a los daños en templos, el Arzobispo de La Serena, Monseñor René Rebolledo manifestó que “sin duda, la información que hay templos y capillas muy dañadas como consecuencia del terremoto es un motivo de onda tristeza. Sin embargo, como Iglesia que peregrina en los valles del Elqui y Limarí nuestra atención en estos momentos son los “templos vivos”, nuestros hermanos que están sufriendo. En nuestras comunidades hacemos lo posible por salir al encuentro de sus necesidades y a animarlos en la esperanza. El Señor nos concederá la oportunidad y también la fortaleza para recuperar los bellos templos que han sufrido en su estructura o en sus aspectos exteriores”.
Graves daños en Montepatria y Sotaqui
El caso más emblemático es el del “Santuario del Niño Dios” de Sotaquí, restaurado tras un largo proceso que concluyó el 2013 se encuentra seriamente afectado. El templo está sin posibilidades de ser utilizada por seguridad y las actividades pastorales se realizan el el salón comunitario, mientras se realiza una evaluación por expertos, dijo el párroco, padre Héctor Zambra. En este caso ya existe un compromiso de parte de autoridades para realizar los trabajos de restauración ya que es Monumento Nacional. La casa parroquial también presenta daños severos.
También se encuentra con serios daños el templo “Nuestra Señora del Carmen” de Monte Patria, que fue restaurado después del terremoto de 1997. Sufrió daños importantes en su estructura y no puede ser utilizado, debiéndose realizar las celebraciones en el salón parroquial. "Lamentablemente con el terremoto nuestro templo quedo en una mala situación, ya que no permite ser utilizado. Nos hemos quedado sin la casa de Dios pero si con el Pueblo de Dios, se han sentido los adobes mas no las piedras vivas" señalo el párroco, padre Jorge Arancibia.
Templos cerrados en Ovalle
En Ovalle, el templo de “San Vicente Ferrer” es el que probablemente tenga los mayores daños, ya que las deficiencias producidas tras el terremoto son evidentes y esto ha obligado a realizar trabajos para evitar el colapso de la estructura. Esto ha motivado la decisión de cerrar la Iglesia debido al riesgo para la integridad que tendría cualquier actividad con presencia de fieles. Durante la semana las celebraciones son en el Salón Parroquia, mientras que los sábados y domingo la Eucaristía se celebra al aire libre, en el patio.
En la capital de Limarí, también la “Iglesia Corazón de María” presenta daños evidentes, principalmente en la torre y se registraron desprendimientos interiores y exteriores. No solamente el templo fue cerrado porque cualquier actividad al interior sería insegura, sino que también por seguridad se cerró el tránsito vehicular y de peatones en el exterior.
Cecilia Marín, Administradora de Bienes del Arzobispado de La Serena, explicó que por ahora existe “un primer avance y luego vendrá una evaluación técnica con profesionales, para posteriormente comenzar a ver la posibilidad de proyectos, tanto con el gobierno como con instituciones extranjeras, que fueron las que nos ayudaron después del terremoto del año 97. También con las fundaciones nacionales que puedan existir actualmente y que tengan recursos para levantar estos templos, que al ser monumentos nacionales o patrimonios históricos, sus restauraciones son de elevado costo”.
Daños menores
En la Vicaría de Limarí, prácticamente la totalidad de los templos en las parroquias de Ovalle, Rio Hurtado, Punitaqui, Montepatria y Combarbalá presentan daños de diversa consideración, ya sea grietas, desprendimiento de estucos, cada de adobe y pintura, debiéndose realizar reparaciones en cada uno, mientras que en Coquimbo hay daños leves producto que los templos son más nuevos y en La Serena hay deterioro menor en algunos templos patrimoniales.
En la Vicaría de Elqui aún falta realizar evaluaciones, pero en principio el templo Parroquial de Algarrobito tiene, entre sus grietas una estructural que puede llegar a ser peligrosa. La Capillas de Altovalsol, las Rojas y de Dos Pinos necesitarán grandes reparaciones, mientras que en El Molle tras muchos esfuerzo se habían realizado reparaciones, para el jueves 24 de septiembre, pero los daños que aparecieron nos obligan a aplazar la ceremonia hasta nuevo aviso. En este caso se habilitó una cuenta bancaria para reunir aportes.
