En un emotivo encuentro cargado de fe y gratitud a Dios, la comunidad de la parroquia “San Juan Bautista” de Coquimbo, celebró sus 35 años, con una Eucaristía que reunió a un gran número de fieles en el templo parroquial.

En su homilía, Mons. Enrique animó a los presentes a continuar su caminar como discípulos del Señor con alegría y compromiso, fortaleciendo la fe que los une. Además, recordó con especial gratitud a todas las personas que, a lo largo de estos 35 años, han contribuido al crecimiento de la comunidad parroquial: sacerdotes, religiosas, catequistas, agentes de pastoral y laicos, cuyas vidas han sido testimonio de entrega y amor al servicio del Evangelio.

La celebración tuvo un significativo momento al finalizar la misa, cuando la comunidad se trasladó al patio central para la bendición de la nueva gruta de “Nuestra Señora de Lourdes”, un anhelado proyecto que se concretó gracias al esfuerzo y dedicación de los fieles. Este espacio, destinado a la oración y devoción mariana, representa un nuevo símbolo de unidad para la parroquia.

Con este jubileo, la parroquia “San Juan Bautista” sigue con su misión evangelizadora, renovando su compromiso de ser una iglesia viva y abierta al servicio de Dios y la comunidad.