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Este domingo 31 de diciembre, al finalizar la Eucaristía del mediodía en el templo Catedral, se entregó a los fieles presentes y medios de comunicación, el saludo de año nuevo del Arzobispo de La Serena, Mons. René Rebolledo Salinas.
El Pastor Arquidiocesano expresó que “ante todo, manifestamos la alegría y la gratitud de vivir este último día del año en Domingo, día del Señor. La comunidad cristiana se congrega para celebrar la memoria de Cristo resucitado. ¡Él es el Señor de los tiempos! Unidos a la Iglesia en el mundo entero celebramos hoy a la Sagrada Familia de Jesús, María y José, atentos a lo que nos dice la Palabra de Dios sobre ella, con el anhelo de obtener inspiración para cada una de nuestras familias y para la gran familia que conformamos todos, nuestra patria, más aún el mundo entero".
Asimismo, enfatizó: “¡Cuánto aprecia nuestro pueblo esta gran y noble institución: la familia fundada en el matrimonio! Es un bien por el que debemos agradecer a Dios, también a nuestros seres queridos, procurando custodiarlo y desplegando todos los esfuerzos que estén a nuestro alcance para salvaguardarlo. En el núcleo familiar se acrisolan los ideales que nos acompañarán siempre en el camino de nuestra vida. De ellas depende en gran medida lo que somos y seremos en el porvenir. ¡Nunca será en vano nuestro trabajo para que la familia brille en su trascendencia, valores e ideales! Esta tarea requiere de la disposición de todos para acompañar, disponiendo generosamente medios requeridos para la institución madre en que se edifica la entera sociedad. ¡Sin duda, si así actuamos, propiciamos la más rentable inversión! Convoco, pues, a vivir este último día de 2017 en familia, dando gracias a Dios por el año transcurrido, también a nuestros seres queridos por su compañía y aporte generoso en nuestro crecimiento, bienestar y felicidad personal. Al mismo tiempo, dispongámonos a iniciar el año nuevo, año del Señor 2018, en su nombre y procurando cercanía, apoyo y amor por nuestras familias".
En el mismo sentido, Mons. Rebolledo manifestó que “el 2018 pasará a la historia porque nuestro país se alegra al acoger al Papa Francisco, Vicario de Cristo y sucesor del apóstol Pedro. Se ha escogido el lema bíblico “Mi paz les doy” (Jn 14, 27), palabra que inspirará su paso entre nosotros. Lo he dicho en repetidas ocasiones: la Visita del Santo Padre Francisco es una gran bendición del Señor para nuestro pueblo. Él nos hablará convocándonos a acoger el gran don de la paz que nos regala Jesucristo, el Príncipe de la paz. ¡Ayer el apóstol Pedro, hoy en su misión el Papa Francisco! Junto a él profesamos con fe y amor a Jesucristo, Señor de los tiempos, ayer, hoy y siempre! (Hb 13, 8). Felicidades y bendiciones del Señor para el año 2018!”, concluyó.
