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El sábado 19 de enero de 2018, a las 22:32, un fuerte sismo sufrió la región de Coquimbo, 6.7 en la escala de Richter. La Arquidiócesis de La Serena comprende gran parte de esta región.
Encomendamos a la bondad y misericordia de nuestro Señor a las dos personas fallecidas.
Otras consecuencias graves de este sismo son los daños en numerosas casas y edificios del casco histórico de La Serena y Coquimbo.
El Vicario General, Pbro. Cristián Montenegro, encabezó una Comisión de emergencia ante la situación, conformada por las siguientes personas: P. José Manuel Tapia, Vicario de Pastoral, la Administradora de Bienes, Cecilia Marín, Juan Luis Hidalgo, adjunto para los asuntos extraordinarios de administración, Patricio Alegre, Director de la Pastoral Social Caritas, Doménico Albasini, arquitecto, y los periodistas Fabián Martínez y Roque Prado.
Entre los edificios eclesiales que han sufrido mayores daños se encuentran la Catedral y el Seminario Mayor “Santo Cura de Ars”, como también templos de las cuatro vicarías.
Por mi parte, dado que me encontraba en Europa, no viví presencialmente el sismo. Sin embargo, apenas ocurrido, recibí numerosos llamados y comunicaciones acerca del sufrimiento y de la angustia por la intensidad y la duración con que se manifestó.
Adelanté el regreso y, gracias a Dios, pude encontrarme con la mencionada comisión arquidiocesana con quienes dialogué la mañana del día viernes 25 de enero.
Invito a todos a proseguir adelante en el nombre del Señor. Tenemos aún vivo el recuerdo de los dos últimos terremotos acaecidos en la zona, 1997 y 2015, y sus graves consecuencias tanto para numerosas personas y familias, como los cuantiosos daños respecto de los hermosos templos de la Arquidiócesis. Con este sismo se nos impone un nuevo desafío. Los convoco a seguir trabajando en comunión, pues con la ayuda del pueblo de Dios también afrontaremos este nuevo reto.
Mañana, domingo 27 de enero, celebraremos la santa Eucaristía en el templo Catedral, Dios mediante. Rogaremos al Señor por quienes más han sufrido como consecuencia del sismo. Manifestaremos una vez más nuestra total confianza en el Señor: estamos en sus manos.
En la ocasión rezaremos también con fe y esperanza por el querido pueblo venezolano. El Señor les conceda su paz.
Los saluda y bendice.
La Serena, enero 26 de 2019.
+René Rebolledo Salinas
Arzobispo de La Serena
