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En el transcurso del encuentro se manifestó el arzobispo René Rebolledo Salinas, saludando y agradeciendo la gran convocatoria. Presentó al señor obispo de Calama, Mons. Tomás Carrasco, quien se encontraba de paso por la ciudad colonial, después de haber predicado retiro al clero de Illapel.
El arzobispo invitó a los profesores a tener en gran consideración y estima, como también a concretar las grandes líneas pastorales de este año: El año de la oración, preparación para la primera Jornada Nacional de la Juventud a realizar en La Serena los días 21 al 26 de enero de 2025 y las prioridades pastorales de la Arquidiócesis que se acentúan los años 2023 – 2025.
Finalizó su intervención animando a quienes sirven en la vicaría, como a los mismos profesores ante las dificultades que provienen sobre todo de los grandes cambios culturales que estamos viviendo y que afectan a niños, adolescentes y jóvenes principalmente, que son los destinatarios principales de las clases de religión.
El P. Oliver Pastén, Secretario Ejecutivo de la vicaría, detalló que este encuentro es importante porque permite intercambiar pareceres y afinar estrategias para abordar el año 2024: “Relevante crear un espacio donde podamos discutir, reflexionar y mejorar nuestras prácticas pedagógicas en el ámbito religioso es fundamental para seguir brindando una educación de calidad que promueva valores éticos y espirituales en los jóvenes”.
Ricardo Jesús Bustamante, integrante del Equipo de Apoyo Pedagógico de la Vicaría de Educación, destacó lo importante que debe ser el acompañamiento que reciban los profesores de religión en cuanto a su formación: “La realidad es que cada institución educativa tiene sus propias necesidades y enfoques pedagógicos, por lo que es crucial estar en constante actualización para poder cumplir con las expectativas y brindar una educación de calidad. Hay que estar al tanto de las metodologías más efectivas y las herramientas educativas innovadoras.
Creo que cuando los profesores de religión nos capacitamos de manera continua y adaptamos nuestras estrategias de enseñanza según las demandas del entorno educativo, logramos mejores resultados en el aprendizaje de nuestros estudiantes. Estamos preparados para enfrentar los desafíos y contribuir de manera significativa al desarrollo integral de los jóvenes, ayudándolos a comprender y valorar la importancia de la dimensión religiosa en sus vidas y en la sociedad en general”.
De esta manera, la Vicaría de Educación sigue comprometida con brindar apoyo formativo y de acompañamiento a los profesores de religión que desempeñan de manera entrañable su labor pedagógica en pro de los valores y la fe católica de los jóvenes.