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La Arquidiócesis de La Serena se encuentra viviendo el Mes Misionero Extraordinario, instancia convocada por el Papa Francisco a vivir durante octubre, con la finalidad de alimentar el ardor de la actividad evangelizadora de la Iglesia ad gentes, bajo el lema Bautizados y Enviados: la Iglesia de Cristo en misión en el mundo. Por ello, este sábado 19, en dependencias de la parroquia “María Reina de los Apóstoles” de Pan de Azúcar, en Coquimbo, fue celebrado el IV Congreso Misionero Arquidiocesano, oportunidad en que estuvieron presentes numerosos agentes de pastoral provenientes de las cuatro Vicarías.
“Como arquidiócesis hemos motivado durante todo el año para que cada parroquia cuente con su equipo misionero. Hemos visitado las cuatro vicarías dando formaciones y también animamos a los equipos para que recorran sus sectores con la palabra del Señor, lo que idealmente se convierta en una actividad habitual – cotidiana, fruto de este año extraordinario”, comentó el P. Francisco Mesa, Director de la Comisión Arquidiocesana de Misiones.
Exposiciones
La jornada, que se desarrolló entre las 09:30 y 13:30 horas, se profundizó sobre el documento misionero del Papa Benedicto XV titulado Contexto misionero actual y el llamado de la Maximum Illud, a cargo del Obispo Prelado de Illapel, don Jorge Vega, Presidente de la Comisión Nacional de Misiones. Por otra parte, el P. Alberto Nahuelanca, Director Nacional de las Obras Misionales Pontificias, expuso sobre La Pastoral Misionera en Chile y sus Líneas Maestras. Finalmente, el P. Francisco Mesa presentó la Visión General de las Misiones en América, desde el Concilio Vaticano II hasta el Congreso Latinoamericano de Aparecida, Brasil.
Al respecto, el P. Nahuelanca manifestó que “en el día de hoy hemos presentado el documento que ha sido fruto del trabajo de la Comisión. Este subsidio esta enfocado en posibilitar una mayor profundización en el compromiso misionero de los bautizados. Cada departamento de misiones es el encargado de ejecutarlo, y los responsables diocesanos son quienes deben impulsar esta iniciativa, con tal que profundicemos respecto a la identidad de nuestro discipulado misionero. El Papa Francisco nos invitó para que durante este tiempo reavivamos esa espiritualidad que va con nosotros desde el bautismo, lo que debe estar permanentemente muy claro, vivo y operante en la vida de los cristianos y los hijos de la Iglesia”, detalló.
